La Real no consiguió el triunfo contra el Chelsea de José Mourinho en el último partido de la liga inglesa, en un partido que sentenció el hispano-brasileño Diego Costa en apenas 7 minutos después de pitar el árbitro el comienzo del choque. El ex-jugador del Atlético de Madrid marcó dos dianas, la primera en el primer minuto de juego demostrando su olfato goleador con un tiro raso ajustado a la esquina izquierda de la portería de Zubikarai y la segunda después de un disparo desde fuera del área que se sacó el internacional alemán Schürrle que golpeó en el palo y Costa empujó dentro de las mallas de Stamford Bridge. Fue un partido marcado por la lluvia que cayó con abundancia sobre el estadio de los 'blues' y por la lesión por una fractura nasal de Ansotegi durante el encuentro, concretamente en el minuto 11.
El conjunto realista salió con la ilusión de hacer un buen partido y redimirse de la derrota que había cosechado dos días antes contra el Newcastle, en un partido que se llevaron las urracas por un gol en el minuto 88. El partido contra el equipo londinense supondría un examen duro para los pupilos de Arrasate, pero por desgracia para los donostiarras todo fueron malas noticias. Además del mal resultado, uno de los jugadores con más minutos del conjunto vasco, Ion Ansotegi, sufría en el minuto 11 una fractura nasal. Con él ya son 6 los jugadores lesionados en la enfermería del conjunto de Zubieta, estando ya Carlos Vela, Jon Gaztañaga, Alfred Finnbogason, Zurutuza, Zaldua y ahora, Ansotegi.
El partido comenzó con un Chelsea rápido, fuerte y con garra que buscaba dar espectáculo ante sus aficionados, y así lo hizo. En el minuto 1, el internacional español, Diego Costa hacía gritar a toda la hinchada 'blue' con un disparo que superaba a Zubikarai por bajo. En el minuto 3, el brasileño Ramires estuvo a punto de marcar el segundo pero su disparo acabó fuera del terreno de juego. Pero eso no era suficiente para el conjunto de Mou y Costa volvió a marcar de nuevo, después de un balón que Schürrle enviaba al poste. La Real se veía superada y sólo De la Bella intentaba atacar con centros al área que atrapaba Thibaut Courtois. La Real lo intentó desde fuera del área, como por ejemplo Granero, pero sus disparos se iban fuera o los paraba el portero belga. Costa volvió a intentar mojar, pero esta vez, el meta txuri urdin lo detuvo bien. La primera parte terminó con un marcador de 2-0, el cual no se movería más.
En la segunda mitad, la Real no buscaría la remontada sino reordenarse atrás y aclarar su centro del campo, pero por su parte el Chelsea buscaba más goles con una presión asfixiante con un Hazard que controlaba la medular y con continuas llegadas de Costa, Torres e incluso Óscar que hizo lucirse al meta donostiarra. Chory Castro en el 81, recuperó el cuero y estuvo a punto de hacer un tanto para la Real, pero su disparo salió desviado. Así terminaba el partido, con una imagen espectacular del Chelsea con un planteamiento de Mourinho cuanto menos genial y con la Real agobiada y sin saber cómo jugar el balón.
El siguiente partido será contra el Eibar antes de disputar el partido que decidirá el futuro txuri urdin en Europa contra el Krasnodar. Esperemos que estas dos derrotas no aminoren la moral blanquiazul y sigan mostrándonos su gran juego con goles, a pesar de las lesiones que arrastra el equipo vasco.
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