El Celta estuvo impreciso durante los 90 minutos, con un medio campo inexistente e incapaz de dar balones a un ataque celeste que estaba sin poder suficiente para marcar un solo gol.
El equipo celeste salió (esta vez con la segunda equipación negra de la pasada campaña en lugar de la verde habitual) bastante despistado al césped, sin precisión en atque y sin capacidad de combinar por la constante presión del conjunto catalán.
Con esto, el Celta no logró disparar a puerta en los primeros 35 minutos hasta que apareció Nolito con un pase a Larivey que fue desviado a córner. Está es de las pocas veces que llegó el equipo vigués en la primera parte, junto a una gran jugada donde Orellana remató a puerta vacía pero donde finalmente la jugada quedó bien anulada por fuera de juego.
En la segunda parte el Espanyol continuó teniendo sus diferentes ocasiones de gol mediante jugadores como Sergio García o Caicedo que estaban muy rápidos, siendo cada vez más y más peligrosos ante la falta de iniciativa por parte del Celta. Dentro de estos minutos se encuentra un tiro de Caicedo, minuto 78, que tira centrado a portería y que Sergio desvia al larguero.
Mientras, el Celta abusaba de balones en largo. El celta, a pesar de todo, tuvo la suya en el minuto 50 donde Orellana se quedo a escasos centímetros de poder rematar el balón estando la portería espanyolista vacía. Ocasión parecida tuvo, apenas unos 15 minutos después Larrrivey que acabó en las manos del portero Casilla in extremis.
En el minuto 83 Berizzo hace el primer y único cambio, saca del campo a Krohn-Dehli e introduce a Sergi Gómez para frenar la presencia de Caicedo, quien entró 5 minutos antes.
Desde la entrada del catalán, el Celta regalaba balón tras balón y se lo cedió al conjunto perico que fue a por el gol. Y lo consiguieron. En el minuto 89 Felipe Caicedo se imposo a Cabral y Sergi Gómez, remató y el esférico acabó colándose por debajo de Sergio Álvarez.
El Celta al final no supo sobreponerse al gol y no encontró el tono en ningún momento del partido, solo vivió de pequeñas ocasiones. El Espanyol no jugó el partido del año pero hizo lo suficiente para poder anular a un equipo que, aunque parecía que volvía a ser el de las primeras jornadas, sigue sin conocer la victoria.
Sara Andújar @Sari_1Direction
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