Lucas, el ángel del Deportivo.

Llegó el pasado verano procedente del PAOK griego y ya es el ídolo de la afición deportivista. Un jugador diferente, carismático y de la tierra, de Galicia.

Desde hace ya tiempo Lucas Pérez había mostrado su interés incondicional de jugar en el equipo de su vida y unas largas negociaciones, el pasado Julio, su fichaje por el club coruñés se hacía oficial. Lucas cumplía un

sueño, pero, el sueño, pronto se convertiría en pesadilla.

Poco más de una semana de pretemporada pudo hacer. Después de unos primeros entrenos de normalidad, el genio gallego sufrió un esguince de rodilla, un esguince que tras complicaciones y recaídas lo tuvo inactiva hasta mediados de octubre, 4 meses de angustia y desesperación para Lucas que no tardaría en ganarse el corazón de cada deportivista.

Su debut en Riazor fue mágico, ganando el equipo 3-0 a todo un Valencia y con gol del artillero coruñés. Ese día, nació un ángel en Riazor.

Pero nada más lejos de la realidad, la siguiente jornada, fue trágica para el ángel.

Doce minutos duró Lucas en el campo contra el Espanyol. En una disputa sufrió una lesión en el nervio del cartílago tal extraña como duradera.

Esa lesión en la rodilla izquierda lo tuvo hasta finales de Enero sin poder disputar un solo minuto y el quirófano amenazando cada semana con más fuerza. El Deportivo sufrió su baja a un nivel extremo, en cuanto a juego y resultados, el Depor es uno sin Lucas y otro muy diferente con Lucas.

Pero tras otros 4 meses de baja, el retorno de Lucas a Riazor como titular volvió a ser mágico. 37 minutos necesito el ángel para devolver la alegría a toda una ciudad. El ángel volvía a marcar en una bonita jugada al contraataque.

Con Lucas cambió todo, los tres primeros partidos con él, 7 puntos de 9 posibles. Una racha que todavía mantiene a día de hoy al Depor fuera de la zona de descenso.

Lucas, un jugador diferente, carismático, eléctrico y que le da un toque de magia a la mediapunta blanquiazul. Las buenas actuaciones del fenómeno gallego le han llevado a negociar ya una posible opción de compra que tiene el Deportivo sobre él, y en cuanto a eso Lucas ya ha dado su opinión. Quiere quedarse en su casa, en su equipo. El ángel quiere seguir en Riazor.