Villareal y Córdoba firman un empate que sirve más a los locales que a los visitantes, en un partido donde Juan Carlos estuvo magistral, sobre todo en los últimos minutos.
El Villareal recibía la visita del colista con las expectativas de aumentar la distancia con el Málaga en su lucha por conseguir acceso a Europa League y romper una racha de 6 partidos consecutivos sin conocer la victoria.
Enfrente, un Córdoba cuyo presidente piensa más en la temporada que viene que en la presente; no es para menos, el equipo no para de dejar pasar trenes y sigue colista, ahora a ocho puntos de la salvación. El descenso matemático es inminente a falta de 18 puntos por disputarse.
Enfrente, un Córdoba cuyo presidente piensa más en la temporada que viene que en la presente; no es para menos, el equipo no para de dejar pasar trenes y sigue colista, ahora a ocho puntos de la salvación. El descenso matemático es inminente a falta de 18 puntos por disputarse.
El guion del partido fue el previsto: el Córdoba plantó cara al Villareal durante toda la primera parte para no aparecer en la segunda. Nadie era dueño claro del balón y el encuentro se convirtió en un intercambio de golpes donde uno contrarrestaba el golpe del otro. Si Campbell estrellaba la pelota en el larguero, Edimar lo intentaba desde fuera del área; si Florín y Fidel estaban a punto de conseguir adelantar a los suyos en una melé dentro del área, Uche disparaba algo desviado; si Gerard volvía a hacer temblar el larguero de la portería de Juan Carlos, Bebé fusilaba a Asenjo y este la mandaba a córner… Sin embargo, estas idas y venidas no terminaban con uno de los dos equipos en la lona.
En la segunda parte, el Córdoba salió muy tímido y el Villareal se volcó en ataque. Aunque las estadísticas digan que el Córdoba disfrutó del 58% de la posesión (al menos en gran parte de la segunda parte), la verdad es que solo tuvo una llegada clara con peligro: un remate de cabeza de Florín, a pase de Edimar, que falló incomprensiblemente. Eso fue en el minuto 63, y ya no volvería a pisar área rival. Antes, nada más salir de vestuarios, Juan Carlos sacó la primera mano salvadora a un testarazo de Gerard Moreno.
Comenzaban en esos momentos los minutos de Juan Carlos. El Villareal decidió asediar a los blanquiverdes y las ocasiones no paraban de llegar, pero no contaban con el meta visitante, que volvía a la que fue su casa. Si bien es cierto que han sido algunos los puntos perdidos por su culpa, hoy estuvo sobresaliente. Además de ese primer cabezazo de Gerard Moreno ya comentado, en los últimos 20 minutos se convirtió en todo un coloso con parada tras parada. Primero fue un disparo de Campbell en el 72, pero no sería el único balón que sacaría al jugador costarricense, ya que volvería a hacerle dos tremendos paradones: en el 86 y en el 89. Por si fuera poco, tras el segundo intento de Campbell, a la salida del córner que provocó su despeje, Vietto remató de cabeza fuerte y abajo; a esa también llegó Juan Carlos.
Para terminar, ya en el descuento, los locales pidieron un posible penalti de Crespo sobre Vietto; Crespo sacó el brazo innecesariamente y contactó con el delantero argentino, pero no pareció suficiente como para pitar penalti. El partido no daría para más. Empate que permite al Villareal aumentar su distancia con el Málaga y colocarse a 6 del conjunto boquerón, aunque no termina de romper su racha de 6 partidos sin ganar. En cuanto al Córdoba, es de los peores resultados: ni lo sepulta definitivamente, ni le da las suficientes esperanzas como para pelear por la salvación; quedan 6 partidos, entre ellos la visita del Barça, y esto cada vez está más difícil.
Villareal 0 – 0 Córdoba
Villareal: Asenjo; Mario, Eric, Víctor Ruíz, Jaume Costa; Campbell, Pina, Trigueros (Jonathan dos Santos, 65’), Cherysev (Moi Gómez, 75’); Gerard y Uche (Vietto, 59’).
Córdoba: Juan Carlos; Gunino, Deivid, Crespo, Edimar; Krhin, Abel Gómez; Bebé, Fede Cartabia (Luso, 58’), Fidel (Heldon, 74’); y Florín (Ghilas, 80’).
Goles:
Árbitro: Ignacio Iglesias Villanueva. Amonestó a Eric por parte del Villareal y a Crespo, a Heldon y a Gunino por parte del Córdoba.
Incidencias: El Madrigal
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