Deportivo de la Coruña y Real Sociedad se enfrentaban en uno de los partidos más destacados de la doceava jornada, debido al debut oficial del flamante y mediático entrenador Txuri-Urdin , David Moyes.
El encuentro estaba marcado por la peligrosa situación clasificatoria que ocupaban ambos equipos, y la necesidad de sumar de tres en tres cuanto antes, para evitar un agónico sufrimiento a sus respectivas aficiones.
Ambos equipos llegaban mermados debido a ciertas lesiones de jugadores importantes en sus equipos; Iñigo Martínez, Lucas Pérez, Xabi Prieto, Luís Fariña...
La Real Sociedad empezó el partido asediando a un Deportivo que estrenaba nuevo esquema con tres centrales y dos carrileros para fortalecer solidaridad y fortaleza defensiva. La Real tuvo en varias ocasiones el partido, y no lo supo aprovechar debido al poco acierto que tuvieron hombres como; Canales, Vela o Castro.
Pero todo cambió en la segunda mitad. Un cambio clave como el de cambiar a Juan Domínguez por Cezary Wilk dio lo que le faltó al Deportivo en la primera mitad. El polaco fue un claro ejemplo de hombre ancla, y gracias a ello, el conjunto coruñés mejoró notablemente, cosa que le hizo dominar en todos los aspectos a la Real y tener el partido en sus manos, pero el balón no quiso entrar.
El esperimento del 5-3-2 que probó Víctor Fernández el pasado sábado dejó una sensación agridulce entre la hinchada. Empecemos, en cuanto a la seguridad defensiva, el Depor lleva unas jornada pletórico. Solo dos goles encajados en los últimos cinco partidos. Otro aspecto positivo es buen trabajo que realizaron los dos carrileros, Juanfran y Luisinho. ¿Lo malo? Que la escasez de cara a gol del conjunto gallego es abismal. Delanteros como Postiga, Toché o Cavaleiro no estuvieron acertados, y muchas imprecisiones en jugadas a balón parado.
Tras el partido podemos decir que el encuentro entre en conjunto gallego y el vasco fue un "Ni pa' ti, ni pa' mi". Ambos equipos se tuvieron que conformar con un pobre punto, que les aleja un poco de la zona de descenso, pero que no les sirve para mantener la tranquilidad.
Como herculino me veo obligado a expresar mi fe en este equipo y más tras partidos como el de ayer. Hay equipo, afición e ideas para lograr la permanencia, pero es VITAL recuperar a todos los lesionados y empezar a coger ritmo en forma de resultados y buen fútbol. Veremos que ocurre el próximo domingo en el Vicente Calderón. Difícil pero no imposible. Pódese.
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