El celta consiguió llevarse una victoria sufrida después de 10 jornadas sin ganar. El partido empezó con dominio de los celeste pero después del gol, acabó defendiendo y dejando el dominio en manos del Córdoba.
Berizzo apostó por un once ofensivo, el cual al principio se vio un poco débil con la llegada del Córdoba salvada por Sergio. Por suerte para el celtismo no llego a nada más. Y la elección de Agusto como medio defensivo provoco una gran noche para el jugador agentino que consiguió robar y sacar balones con calidad.
En el primer cuarto de hora el Celta jugó a un gran nivel, llegando sucesivamente a la porteria rival que por poco no remataron el gol. La primera llegada llego en el minuto 4 a través de un remate de Larrivey y dos minutos después, en el 6, se produce otra llegada por parte de Santi Mina en la que el disparo se fue desviado por poco.
El Celta avasallaba al Córdoba, que bastante hacía con contener como podía las acometidas celestes. Santi Mina, que arrancó el partido como un ciclón, obligó a lucirse a Juan Carlos tras una gran acción personal, y en el mismo minuto fue Krohn-Dehli quien hizo trabajar nuevamente al meta. Tras esta acción, Juan Carlos solicitó la entrada de las asistencias médicas y cortó el ritmo del Celta en cierto modo.
A los 36 minutos se pidió penalty por una caída de Nolito, seguidas por nuevas ocasiones de los vigueses.
El Celta arrancó la segunda parte con menos intensidad que la primera. Aun asi a los 10 minutos logró el gol que mereció en la primera parte. Fue tras una gran jugada iniciada por Mina, que Orellana, con calidad, la deja pasar hacia Nolito. Al final golazo del andaluz.
Tras el gol, el Celta cedió terreno, en parte fruto de la tensión por los diez partidos sin ganar anteriores. Sergio evitño el empate a un cuarto de hora del final con una gran estirada.
Cuando quedaban diez minutos, una alocada entrada de Planas metió pánico a los aficionados celestes que habían asistido a Balaídos. El arbitro Teixeira Vitienes señaló penalty, pero su asistente había señalado falta anterior del jugador del Córdoba. esta acción provoco la suspensión momentanea del partido durante cinco minutos. Finalmente la jugada acabó con falta a favor del Celta.
El Córdoba fue incapaz de marcar y el Celta supo adelantar las lineas para tener más el balón y evitar el peligro, teniendo incluso una última oportunidad de gol de la mano de Larrivey.
La victoria le da vida al Celta, y a Berizzo, que de momento tras este encuentro seguirá al frente del banquillo. Los celeste se situan a siete puntos del descenso pero sin acabar de tener las buenas sensaciones del inicio de liga. El próximo fin de semana le toca jugar en el dificil estadio de Anoeta.
Sara Andújar ( @sara_1Direction)
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