El "bicho" ha empezado la temporada con un hambre atroz. Le cascó 3 el sábado al Deportivo de La Coruña, y ayer le hizo nada más y nada menos que otros cuatro goles al Elche. 9 goles suma ya en liga, en solo 5 jornadas (teniendo en cuenta que contra la Real Sociedad no jugó, sale a más de dos goles por partido). El portugués, actual Balón de Oro y para la mayoría el gran favorito para ganarlo este año de nuevo, se comió al equipo dirigido por Fran Escribá. Dos goles de penalti (uno de ellos inventado), otro con un soberbio testarazo de los que nos tiene acostumbrado y un cuarto gol en los compases finales del partido tras una gran jugada individual de Bale formaron el perfecto póker de goles de Cristiano Ronaldo.
El partido empezó con susto para el Real Madrid. Sendos errores de Carvajal y Marcelo en los primeros compases de la contienda generaron que los dos laterales madridistas empezaran el partido ya con amarilla. Entre medias, el árbitro, Clos Gómez, inventó un penalti en un lance dentro del área entre CR7 y Mosquera que transformó Albácar y al que estuvo a punto de llegar Keylor, que ya llevaba dos buenas paradas.
Poco después, James se sacó un centro de su barita mágica y Bale cabeceó a dentro de las redes. Después llegó el espectáculo de Cristiano Ronaldo. Primero un penalti inventado por Marcelo, que se dejó caer dentro del área, después un soberbio gol de cabeza, seguido de otro penalti que le cometieron a él mismo y finalizando el partido con el último de su colección, a pase de Bale como ya hemos comentado.
Carletto introdujo cambios en el esquema. El más significativo era el de Keylor Navas por Casillas, pero el costarricense cumplió y con creces. Casi para un penalti y fue un cerrojo ante los pocos tiros que le llegaron del equipo ilicitano. Seguro en las jugadas a balón parado, Keylor trajo tranquilidad a la grada. Y, aunque los jugadores pidieron en las declaraciones a la prensa que se dejara ya el debate de la portería, la actuación de Navas ayer da pie a que el debate se reabra.
Quizás el jugador más llamativo del partido, aparte de Cristiano, fue Illarramendi. El de Mutriku hizo un partidazo descomunal. De los que se deberían poner en las escuelas de fútbol. Seguro, abriendo juego, asegurando el pase, atreviéndose a todo. Nada que ver con el Asier que vimos la temporada pasada. También hay que destacar el trabajo de Isco, que eclipsó a James y a Bale, que estuvieron bastante desaparecidos ayer. Varane también hizo un gran partido, serio y seguro, como aquél chaval que le quitó el sitio a Pepe en el último año de Mourinho. Los teóricos revulsivos demostraron ayer que Carlo tiene un gran fondo de armario,y eso que aún no ha vuelto Jesé, al que todo el madridismo espera con ganas.
El Elche hizo muy poquito. Al principio del partido dio el susto con tres jugadas, entre ellas el penalti, pero poco más. Al comienzo de la segunda parte apretó al Real Madrid, que entró dormido del descanso, pero no tuvieron oportunidad ante el equipo blanco. Lo suyo es otra liga. Lo mejor del equipo ilicitano fue el portero, Manu Herrera, que sacó varios balones bastante difíciles.
La conclusión que podemos sacar de este partido es que el Madrid ha despertado, y tiene hambre. En 7 días ha jugado 3 partidos y ha metido 18 goles, ocho de ellos de Cristiano Ronaldo. Casi nada.
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